En los últimos años, se ha venido popularizando el término “Experiencia de Usuario” en el entorno profesional del desarrollo web. Intentando superar las propias limitaciones que encierra la usabilidad. Un terreno donde no se contempla con precisión, el comportamiento emocional de los usuarios.
Surge entonces, la Experiencia de Usuario (User eXperience, UX, en inglés), como una solución de diseño más integradora e inclusiva (Hassan, 2005) y un nuevo enfoque para el desarrollo de productos interactivos.
Con el objetivo de representar un cambio emergente del concepto de usabilidad; la Experiencia de Usuario, va más allá de la optimización en la interacción. Se involucra en la resolución del problema estratégico de la utilidad del producto, y el problema psicológico de la diversión de su uso (D’Hertefelt, 2000).
Para tratar de clarificar el tema, se incluyen a continuación, algunas definiciones son expuestas por diferentes autores:
Nielsen & Norman Group
La reconocida firma en usabilidad, fundada por dos de los más reconocidos expertos mundiales en el tema (Jakob Nielsen y Donald Norman), tienen su propia definición :
“… abarca todos los aspectos de la interacción del usuario final con la empresa, sus servicios y sus productos. El primer requisito para una experiencia de usuario efectiva, es encontrar las necesidades exactas del cliente. En segundo lugar vienen la sencillez y la elegancia que producen los productos fáciles de usar. De este modo, la verdadera experiencia de usuario, va mucho más allá de dar a los clientes lo que ellos dicen querer. Con el propósito de alcanzar la experiencia de usuario de alta calidad en la oferta de una empresa, debe haber una fusión de los servicios de múltiples disciplinas, incluyendo la ingeniería, el marketing, el diseño gráfico e industrial, y el diseño de interfaz”.
Alberto Knapp Bjerén
El CEO de The Cocktail, ofrece una definición del concepto de Experiencia de Usuario un poco más concreta:
“Es el conjunto de ideas, sensaciones y valoraciones del usuario, resultado de la interacción con un producto; es el resultado de los objetivos del usuario, las variables culturales y el diseño de la interfaz”.
En la anterior definición, Knapp Bjerén (2003), determina no sólo de qué fenómeno es resultante, sino también qué elementos la componen y qué factores intervienen en la interacción.